Las patatas al horno son uno de los acompañamientos más versátiles y apreciados en la gastronomía mundial. Este tubérculo, que llegó a España desde América en el siglo XVI, se ha convertido en uno de los tres alimentos más consumidos en nuestro país gracias a su fácil cultivo, cualidades nutritivas y poder saciante. Sin embargo, no todas las variedades de patatas se comportan igual cuando se cocinan al horno. La elección adecuada puede marcar la diferencia entre unas patatas perfectamente crujientes por fuera y tiernas por dentro, o un resultado decepcionante. En este artículo descubriremos cuáles son las mejores variedades de patatas para el horno, sus características y cómo prepararlas para obtener resultados profesionales en casa.
¿Por qué es importante elegir la variedad adecuada para el horno?
Cuando hablamos de patatas al horno, la elección de la variedad no es un detalle menor. Cada tipo de patata tiene una composición diferente en términos de almidón, agua y azúcares, lo que determina directamente cómo se comportará durante la cocción.
Las patatas con alto contenido de almidón tienden a desarrollar una textura esponjosa en el interior y una piel crujiente en el exterior cuando se hornean. Por otro lado, las variedades más cerosas o con bajo contenido de almidón mantienen mejor su forma, pero pueden no lograr ese contraste de texturas tan valorado en las patatas asadas.
El contenido de azúcares naturales también influye en el grado de dorado y caramelización, aspectos fundamentales para conseguir unas patatas al horno con ese atractivo color dorado y sabor característico. Elegir la variedad correcta puede suponer hasta un 70% del éxito de una receta de patatas horneadas, lo que hace que esta decisión sea crucial para los amantes de la buena cocina.
Características de las patatas ideales para hornear
El papel del almidón
El contenido de almidón es quizás el factor más determinante para identificar una buena patata para hornear. Las variedades con niveles medios a altos de almidón (entre el 18% y el 22%) suelen ofrecer los mejores resultados, ya que:
- Proporcionan una textura esponjosa y ligera en el interior
- Facilitan que la piel se vuelva crujiente durante la cocción
- Absorben mejor los sabores de aceites, hierbas y especias
La importancia de la piel
La piel de la patata juega un papel fundamental cuando hablamos de horneado. Las variedades con piel más gruesa y resistente suelen funcionar mejor porque:
- Actúan como una barrera natural que mantiene la humedad en el interior
- Desarrollan una textura crujiente muy agradable al paladar
- Concentran gran parte de los nutrientes del tubérculo (aproximadamente la mitad de la fibra de la patata proviene de la piel)
Tamaño y forma
El tamaño y la forma también son relevantes para obtener unas patatas al horno perfectas:
- Las patatas de tamaño medio a grande permiten una cocción más uniforme
- Las formas regulares y ovaladas facilitan un horneado parejo
- Un grosor adecuado asegura que el interior se cocine completamente mientras el exterior se dora
Las mejores variedades de patatas para el horno
Ahora que conocemos las características ideales, vamos a explorar en detalle las variedades más recomendadas para cocinar al horno, analizando sus particularidades y cómo sacarles el máximo provecho. En España se cultivan alrededor de 150 tipos distintos de patatas, pero solo algunas son ideales para el horno.
Patata para horno variedad Russet
La patata Russet, también conocida como Idaho, es considerada por muchos chefs como la reina de las patatas al horno. Originaria de Estados Unidos, esta variedad destaca por:
Alto contenido de almidón (20-22%)
Piel marrón gruesa y rugosa
Pulpa blanca y seca
Textura extremadamente esponjosa cuando se hornea
Es ideal para preparar las clásicas «jacket potatoes» o patatas con chaqueta al estilo inglés, donde se hornea la patata entera y luego se sirve con diversos acompañamientos. También es perfecta para patatas rellenas y doble horneadas.
La patata Russet se caracteriza por desarrollar una piel extremadamente crujiente mientras su interior queda suave y esponjoso, creando ese contraste de texturas tan apreciado. Según los expertos culinarios, «si te estás preguntando cuál es la mejor variedad para asar, son las de tipo Russet o Idaho. Estas patatas son ideales porque tienen un alto contenido de almidón».

Patata para horno variedad Monalisa
La Monalisa es una de las variedades más populares y accesibles en España. Esta patata semitardía ofrece excelentes resultados cuando se hornea gracias a:
Contenido medio de almidón
Piel fina y amarillenta
Pulpa amarilla clara
Excelente equilibrio entre cremosidad y firmeza
Una de las mejores variedades para cocinar patatas al horno es la Monalisa. Además, presenta la ventaja de encontrarse fácilmente en el mercado y están siempre muy bien de precio, lo que la convierte en una opción práctica y económica.
La Monalisa es extremadamente versátil, siendo perfecta tanto para hornear patatas enteras como para cortarlas en gajos o rodajas antes de llevarlas al horno. Sin embargo, no es recomendable utilizarla para hacer purés porque se suele deshacer.

Patata para horno variedad Agria
La patata Agria es una variedad semi tardía muy apreciada en la cocina española, especialmente por su excelente comportamiento tanto en fritura como en el horno. Se caracteriza por:
Contenido medio-alto de almidón
Piel amarillo pálido
Pulpa amarilla
Baja absorción de aceite
En el horno, la patata agria se convierte en un acompañamiento perfecto para carnes y pescados. Mantiene su forma y adquiere un exterior crujiente. Esta variedad es particularmente buena para patatas asadas en gajos o las famosas patatas Hasselback, donde se realizan cortes finos sin llegar a separar completamente las rodajas.
También es destacable que la patata Agria es una de las variedades típicas que se cultivan en España, siendo muy utilizada para hacer patatas fritas o las chips, panaderas, también para pochar y hacer tortilla de patata.
Patata para el horno variedad Kennebec
La Kennebec es una variedad muy apreciada, especialmente en ciertas regiones españolas como Cataluña, donde las Patatas de Prades con IGP son de esta variedad. Sus características incluyen:
Piel amarilla parduzca
Pulpa blanca
Textura firme pero cremosa
Excelente absorción de sabores
Las patatas más conocidas de Cataluña, las de Prades, con IGP, son Kennebec. Son patatas tardías. Elegid las si tenéis que hacerlas al horno, fritas o cocidas. Es la mejor compañera de una paletilla de cordero, porque absorbe muy bien los jugos de los guisos.
Esta capacidad para absorber los jugos y sabores la hace ideal para hornear patatas junto a carnes o pescados, permitiendo que se impregnen de todos los aromas del plato principal. Su textura final es perfecta para acompañar platos con salsas, ya que la patata se convierte en un excelente vehículo para transportar todos los sabores.

Patata para el horno variedad Red Pontiac
Fácilmente reconocible por su distintiva piel roja, la Red Pontiac es una variedad con gran presencia en el mercado europeo. Sus características son:
Piel roja intensa
Pulpa blanca y cerosa
Ojos ligeramente hundidos
Textura firme durante la cocción
A pesar de no utilizarse demasiado, este tipo de patata tiene un gran consumo dentro del ámbito europeo. En el mercado la diferenciareis por su característica piel roja, por tener los ojos hundidos para adentro y la carne blanca y cerosa.
Es especialmente adecuada para hornear patatas enteras o en mitades, ya que mantiene muy bien su forma durante la cocción. Este tipo de patata es ideal para hervir, asar, hacer al horno o incluso al microondas principalmente. Su textura cerosa hace que mantenga muy bien el sabor cuando se hornea, siendo una excelente elección para quienes prefieren las patatas con más cuerpo y menos harinosas.

Patata Soprano
La Soprano es una variedad 100% española relativamente nueva en el mercado pero que ha ganado popularidad rápidamente gracias a su excelente comportamiento en la cocina. Sus características incluyen:
Patata nueva (temprana)
Contenido equilibrado de materia seca
Baja absorción de aceite
Resistencia durante la cocción
Patata nueva y 100% española, se trata de la variedad versátil por excelencia, gracias a su contenido en materia seca. Ideal para freír, ya que absorbe poco aceite; pero también quedan perfectas cocidas y asadas, ya que son resistentes y no se rompen.
Esta resistencia la hace perfecta para recetas de patatas al horno donde necesitamos que mantengan bien su forma, como en guarniciones o ensaladas tibias. Su condición de patata temprana también significa que tiene un sabor más suave y ligeramente dulce, lo que puede aportar un matiz interesante a tus platos.

Consejos prácticos para obtener las mejores patatas al horno
Además de elegir la variedad adecuada, existen técnicas y trucos que pueden elevar significativamente la calidad de tus patatas horneadas. A continuación, compartimos algunos consejos de expertos para conseguir resultados profesionales.
Preparación previa de las patatas al horno
La preparación adecuada de las patatas antes de hornearlas es fundamental:
- Lavado: Te recomendamos que siempre las compres enteras y las peles en tu cocina. Lava a conciencia las patatas para eliminar restos de tierra o suciedad.
- Secado: Después de fregar las papas, asegúrate de secarlas bien. La humedad excesiva en la piel puede filtrarse en la papa durante el horneado y causar pieles empapadas. Un buen secado es clave para conseguir esa textura crujiente tan deseada.
- Pinchado: Realiza pequeños pinchazos con un tenedor para permitir que escape el vapor durante la cocción y evitar que revienten.
El truco de Martín Berasategui para las patatas al horno
El reconocido chef español Martín Berasategui, con sus 11 estrellas Michelin, comparte su método infalible para conseguir patatas al horno perfectas:
- El primer paso es precalentar el horno a 180 ºC.
- Lo primero es lavarlas a conciencia, secarlas y cortarlas por la mitad. Este pequeño truco no sólo acelera la cocción, sino que también asegura que se cocinen de manera uniforme.
- El siguiente paso clave de Berasategui es engrasar la bandeja del horno con un poco de aceite y colocar las patatas con la parte cortada hacia abajo. Es fundamental que queden bien impregnadas, pero sin pasarse, para que se doren sin volverse aceitosas.
- Salpimienta al gusto y añade las especias que prefieras. El romero y el ajo en polvo son opciones sencillas pero efectivas para potenciar su sabor.
- Con todo listo, mete la bandeja en el horno y deja que las patatas se cocinen durante unos 30 minutos. El tiempo puede variar según su tamaño, así que lo mejor es ir pinchándolas con un tenedor para comprobar si están tiernas.
Temperatura y tiempos para las patatas al horno
La temperatura del horno y el tiempo de cocción son variables cruciales:
- Para patatas enteras grandes: 180-200°C durante 45-60 minutos
- Para patatas cortadas en mitades: 180-200°C durante 30-40 minutos
- Para patatas cortadas en gajos: 200-220°C durante 20-30 minutos
Cuando la superficie esté dorada y el interior, tierno, sabrás que están listas. Siempre es recomendable comprobar el punto de cocción pinchando con un tenedor o un cuchillo.
Si tienes problemas con patatas que tardan demasiado en cocinarse, puedes eliminar el agua, aumentar la temperatura a 400-450, y simplemente lavar/restregar la patata, ponerla en la rejilla del horno y hornear.
Potenciadores de sabor de las patatas al horno
Para elevar el sabor de tus patatas al horno, considera estos añadidos:
- Hierbas aromáticas: romero, tomillo, orégano o salvia
- Especias: pimentón dulce o picante, comino, curry
- Aceites aromatizados: aceite de oliva infusionado con ajo o hierbas
- Sales especiales: sal gruesa marina, sal ahumada o sal con hierba

En Patatas FRUSANGAR nos enorgullece ofrecer las mejores variedades de patatas cultivadas con los más altos estándares de calidad para garantizar resultados excepcionales en todas tus recetas de patatas al horno. Tanto si eres un cocinero profesional como un entusiasta de la cocina casera, esperamos que este artículo te ayude a elegir la variedad perfecta para cada ocasión y a disfrutar de la versatilidad y el sabor incomparable de las patatas horneadas.
¡Ahora es tu turno! Experimenta con diferentes variedades y técnicas, y descubre tu combinación favorita para crear patatas al horno dignas de un restaurante estrella Michelin en la comodidad de tu hogar.